SITUACIÓN
En los límites con León y Zamora, en el extremo oriental de la provincia de Ourense, formando parte, desde siempre, de la Comarca de Valdeorras, y ocupando una superficie de 224,32 kilómetros cuadrados, la segunda más extensa de la provincia, se encuentra Carballeda. Su capitalidad es Sobradelo, situado sobre el antiguo trazado de la N-120 que une Galicia con la meseta, y en la vía férrea Palencia - A Coruña.
Alejado de los centros de gravedad del terriorio gallego, Carballeda ha apostado por la explotación industrial de la pizarra, base de su riqueza y princiapal recuro endógeno.
DESCRIPCIÓN GEOGRÁFICA
La geografía del municipio viene definida por dos factores: los encajados cursos fluviales -principalmente del río Casoio y, en un corto tramo, del río Sil-, y las elevadas sierras que lo enmarcan.
Carballeda es un municipio eminentemente montañoso que se corresponde, casi en su totalidad, con un bloque levantado por efecto de la tectónica (Serra do Eixe). En el sur se localizan las máximas elevaciones que constituyen la línea de cumbres, practicamente sin formas puntiagudas, y la divisoria de aguas (Macizo de Pena Trevinca 2.119 metros en Pena Negra, Pena Survía con 2.095 metros la Serra do Eixe con mas de 1.500 metros; y al sureste Os Vales de Casaio, 1.773 metros). Esta zona montañosa, drenada por cortos y encajados cursos fluviales tributarios del río Casaio, es el dominio de las pizarras y esquistos, localizándose aquí las canteras más importantes.
Hacia el norte, la altitud va descendiendo hasta un mínimo situado en el valle del Sil -con depósitos aluviales-, para comenzar nuevamente a aumentar a partir de éste, llegando a 900 metros en el extremo más septentrional. El Sil, con una dirección este-oeste, discurre por el reborde septentrional del municipio, formando un valle encajado donde está el embalse de Pumares.
El paisaje vegetal está formado por monte bajo, con predominio del matorral, se encuentran también encinas, alcornoques y avellanos, de claro carácter mediterráneo, además de frondosas, -sobre todo castaños-, especies ripícolas y coníferas.
HISTORIA
Carballeda participó, en todo momento, de la historia de la Comarca de Valdeorras. En su territorio se asentaron diversos pueblos: con los suevos se acuñó moneda en las cecas existentes en el lugar; los romanos buscaron los aluviones auríferos del Sil. Durante el medievo, estas tierras fueron posesión de distintos terratenientes (descendientes del Conde Froila Díaz, de los Castro gallegos, de los Condes de Lemos y finalmente, del Condado de Ribadavia).
Sus gentes protagonizaron episodios en la Guerra de la Independencia, luchando contra los franceses al mando del Abad de Casaio.
ECONOMÍA.
Carballeda participó, en todo momento, de la historia de la Comarca de Valdeorras. En su territorio se asentaron diversos pueblos: con los suevos se acuñó moneda en las cecas existentes en el lugar; los romanos buscaron los aluviones auríferos del Sil. Durante el medievo, estas tierras fueron posesión de distintos terratenientes (descendientes del Conde Froila Díaz, de los Castro gallegos, de los Condes de Lemos y finalmente, del Condado de Ribadavia).
Sus gentes protagonizaron episodios en la Guerra de la Independencia, luchando contra los franceses al mando del Abad de Casaio.
ECONOMÍA.
La economía local está determinada por la explotación de la pizarra. Tradicionalmente existió una minería destinada al corte y preparación de la pizarra para techumbres; a partir de 1945 tomó cuerpo con carácter industrial, iniciando una carrera de ascenso hasta la actualidad, exportando su producción a países de todo el mundo (Benelux, Japón, Australia, etc.) y generando un interesante tejido industrial.
Hoy en día están en activo 47 canteras de pizarra ubicadas, fundamentalmente, en el área de Casaio, y funciona una Escuela de Colocadores de Pizarra en el Centro Tecnológico de la pizarra de reciente creación.
El 85% del territorio es espacio forestal; hay que exceptuar algunas plantaciones de viñedo apoyadas en la Denominación de Origen Valdeorras.
CULTURA, MONUMENTOS Y TURISMO
En estas tierras, en las que el Sil crea un encajado valle y en donde se alcanzan las mayores alturas de Galicia, los enterramientos dolménicos de Lombo das Arcas evidencian la antigüedad del poblamiento.
El territorio estuvo surcado por la vía militar romana XVIII o Vía Nova, quedando restos de puentes romanos en el término. El de Sobradelo, construido con piedra roja del país, tiene siete arcadas y su arco central fue cortado durante la invasión francesa por el Abad de Casaio. En sus proximidades se encuentran los pilares de la Pontóriga sobre el Sil, por donde atravesaba la vía militar para adentrarse en El Bierzo; también está el puente sobre el río Casaio; de un solo arco y construido con lajas de pizarra, que unía caminos secundarios de la Vía XVIII; en su arco tuvo una vivienda.
De interés paisajístico, por la riqueza de la fauna y flora de las ladras que lo encajonan, es el embalse de Casoio, con una pequeña presa de 2 metros de altura. Entorno semejante ofrece el embalse de Pumares.
Desde Carballeda se puede acceder al macizo de Pena Trevinca, que ofrece uno de los conjuntos naturales más interesante, formados por fragas autóctonas y, en el límite con A Veiga está el único bosque existente en Galicia de "teixos" (O Teixadal) que, pese a su enclave en un paraje recogido, necesita medidas de protección.
Desde el punto de vista artístico sólo queda la fachada plateresca de la antigua iglesia de Casaio, enmarcada entre dos columnas estriadas, con medallores de San Pedro y San Pablo en los ángulos y una leyenda alusiva a la Virgen en la parte superior, y que hoy adorna la entrada al cementerio.
FIESTAS
Entre las fiestas que se celebran en el municipio destaca la de la Encarnación en Sobradelo (8 de abril). En Lardeira, núcleo de población más alto de Galicia (1.280 metros), tiene lugar la Romería del Padre Eterno, celebrada el día de la Santísima Trinidad. En su santuario hay una interesante talla triple, realizada en una sola pieza de madera.
En Casaio (el primero de setiembre) se celebra la Romería de San Xil.
TELÉFONOS Y DIRECCIONES DE INTERÉS
AYUNTAMIENTO 988 33 50 02
Yo que nací y crecí,
ResponderEliminarallí tan cerca del cielo;
muy pronto aprendí,
que no hay un lugar tan bello
como mi querido pueblo.
En Casaio me siento feliz,
allí pedo sentir el cariño
de la amistad y la familia
y la devoción a San Gil.
A mi pueblo y a mi gente
ResponderEliminarle ofrezco todo el cariño,
porque lo tengo presente
desde que era muy niño.
Yo le ofrezco a Casaio
mis humildes poesías,
porque allí siento el amparo
de la amistad y la familia.
Gracias damos a San Gil
por conservarnos la fe,
por alentar nuestro vivir
y librarnos de padecer.
El viejo Anselmo de Casaio.
Cuando estaba tan lejos
ResponderEliminarde mi querido pueblo,
me sentía atraído por San Gil;
pero, ahora que soy viejo
siento un gran deseo
de no parar de escribir,
para mostrar lo que siento
en este lugar sagrado
de San Gil de Casaio.
Se lonxe de Casaio
ResponderEliminareu teño que morrer,
quero que me encineren
para que poida volver.
Voarán as miñas cinzas
polos montes de San Xil,
e descansará a miña alma
coa santidá que hai alí....
Naci en Casaio, año 1948, no tengo recuerdos del pueblo ni de sus gentes, pues apenas viví justo el tiempo justo y necesario para que Casaio conste en mi partida de nacimiento.
ResponderEliminarPero aunque sólo haya sido mi lugar de nacimiento y no haber conocido nada de nada, ni a nadie, siempre he sentido un cariño muy especial por ese pueblo que me vio nacer.
Ese deseo me llevó, no hace muchos años, algo dentro de mi me pedía visitar mi pueblo natal. Intentar saber y conocer un poco más. Me gustó su iglesia, la iglesia en la que fui bautizado,sus casas antiguas, sus balcones, sus tejados inclinados, recorrwr sus calles estrechas, esas calles por las que nunca pude caminar, contemplar la naturaleza que lo rodea, ahora un poco más polvorienta quizás por las explotaciones de pizarra cercanas. Subí hasta Peña Trevinca, respiré profundamente, llené mis pulmones de aire fresco y limpio y me empape de esos paisajes maravilloso.
También pregunté por unas minas de las que mi padre me había hablado, pero no supieron darme razón o no acerté con la persona que pudiese informarme.
Quizás no regrese nunca más, pero ese viaje, rellenó una parte de mi vida con algo tan simple y tan deseado como era conocer mi lugar de nacimiento.
Cuando me preguntan, donde naciste?..., respondo con orgullo, en Casaio!. La siguiente pregunta evidentemente es? ..., y eso dónde está? La respuesta es fácil, muy fácil, en mi corazón.